Llega el momento más decisivo de tu vida, encontraste a tu media naranja y decides formar una familia. ¡Es el final perfecto, mejor que el de cualquier película de Disney! Pero o sorpresa, te das cuenta que tus hijos son idénticos a tu ex.
Antes de desmayarte, tal como nos pasó a nosotros, te compartimos que este acontecimiento es más normal de lo que se cree y ojo, no se trata de una infidelidad, sino de un mal juego que nos hace la genética y que ha estado presente por muchos años: Una teoría ha tratado de comprobar con pruebas en moscas. La telegonía (bautizada así por el biólogo alemán August Weissman en 1800s), aseguraba que cuando un espermatozoide lograba llegar al útero, impregnaba óvulos inmaduros y después era absorbido por el organismo de la mujer, cuando llega una nueva pareja, este nuevo código genético podría ser el responsable de que el bebé tenga las características de la ex pareja.
Pero, espera, no te alarmes, resulta que esta teoría aún no está comprobada en un 100%, ya que son muy pocos casos en humanos en la que se ha presentado. Sin embargo, esta teoría abre una nueva posibilidad para la experimentación sobre cómo funciona la genética humana.
¡No se vale usarla como pretexto para cubrir alguna infidelidad! Cuéntanos tu opinión.