Antonio Brown fue despedido de los Buccaneers después de salir de manera insólita del campo antes que Tom Brady mostrara su característica tranquilidad, guiando a Tampa Bay en una serie ofensiva de 93 yardas en los minutos finales para rescatar una victoria de 28-24 sobre los New York Jets.
La locura de Brown ocurrió cerca del final del 3er cuarto, cuando Tampa Bay perdía 24-10. El receptor conversaba con su compañero Mike Evans, cuando de pronto se quitó uniforme y arrojó sus guantes y la camiseta a las tribunas. Luego saludó a los aficionados y recorrió la zona de anotación rumbo al túnel en el MetLife Stadium.
El ex receptor de Tampa Bay, Brown recibió una suspensión de tres juegos el mes pasado por violar los protocolos de la liga para el COVID-19, que además también cuenta con un historial de problemas de conducta personal y decisiones extrañas.