Las protestas en contra de la pobreza y la desigualdad se reanudaron ayer en Colombia luego de que el presidente Iván Duque presentó un plan fiscal por cuatro mil millones de dólares con el objetivo de ayudar al gobierno a pagar programas sociales y gastos relacionados con la pandemia.
Miles de personas salieron a marchar durante el Día de la Independencia en las principales ciudades de Colombia mientras Duque delineaba ante el Congreso los logros de su gobierno y presentaba su plan fiscal.
El proyecto es menor al paquete de 6,300 millones de dólares que presentó en abril y que detonó protestas multitudinarias en toda Colombia, en las que decenas de personas murieron. La nueva propuesta coloca una mayor carga fiscal a los ingresos corporativos y descarta una iniciativa previa que aplicaba impuestos sobre la venta a artículos básicos como la sal y el café.
Los manifestantes señalaron que el nuevo plan no es suficiente para impulsar el gasto en educación y creación de empleos en Colombia, donde la economía se contrajo 7% el año pasado y llevó a otros tres millones de habitantes a la pobreza, según el gobierno nacional.