La oficina de la MLB suspendió ocho juegos a Joe Kelly, pitcher de los Dodgers de Los Ángeles, quien trató de golpear a los bateadores de los Astros con sus lanzamientos. Al terminar la actuación de Kelly, el lanzador se burló de los bateadores de los Astros, lo que desató un pequeña pelea.
Las bancas se vaciaron, pero el incidente no pasó a mayores, al final el juego lo ganaron los Dodgers 5-2. Este encuentro marcó la primera vez que ambos equipos chocaron desde que se reveló que los Astros robaron señales de los rivales en 2017, cuando vencieron a Los Ángeles en la Serie Mundial.
Derivado del incidente, Dave Roberts, manager de los Dodgers, fue suspendido un juego, mientras que el manager de los Astros, Dusty Baker, fue multado con un monto no revelado.