fbpx

La policía rusa arrestó este sábado a más de 1.000 manifestantes -según las cifras de la ONG OVD -Info- que exigían en Moscú elecciones libres y justas pese a la creciente presión ejercida contra la oposición durante los últimos días.

Las fuerzas de seguridad realizaron detenciones masivas entre los participantes que llegaban a la principal arteria de Moscú, la avenida Tverskaya, al grito de “Vergüenza” o “Queremos elecciones libres”, y les hicieron retroceder por la fuerza hacia las calles adyacentes.

Esta concentración no autorizada frente al ayuntamiento de la capital se produce menos de una semana después de una manifestación sin precedentes desde el movimiento que acompañó al regreso de Vladimir Putin al Kremlin en 2012.