Infiltraciones de agua tan antiguas como los últimos episodios glaciares fueron descubiertas en un acuífero del central estado mexicano de Puebla por científicos del Instituto Politécnico Nacional de México, informó este domingo la institución educativa.
En un comunicado, el IPN confirmó que las infiltraciones del acuífero del Valle de Puebla tienen una edad superior a los 35.000 años de antigüedad que corresponden con los últimos episodios glaciares e interglaciares.
Los expertos del Centro Interdisciplinario de Investigaciones y Estudios sobre Medio Ambiente y Desarrollo del IPN determinaron que la infiltración en el acuífero corresponde al periodo Cuaternario en las épocas del Pleistoceno y el Holoceno.
Pedro Francisco Rodríguez Espinosa, investigador del CIIEMAD, dijo que las precipitaciones interglaciares del Pleistoceno sumadas a las ocurridas en el Holoceno lograron infiltrarse en la estructura volcánica de la Malinche y en las estribaciones de la Sierra Nevada, que tenía gran actividad volcánica.
El IPN celebró que con esta investigación se coloca como pionero en la datación isotópica del agua subterránea en el acuífero del Valle de Puebla lo que “permitirá aplicar acciones encaminadas a regular la sobreexplotación de los recursos hídricos”
Los análisis permitieron hallar también agua infiltrada con edades de 2280 años, 7890 años, 8700 años y hasta de 13750 años de antigüedad, sostuvo el IPN, el mayor centro de educación tecnológica de México con una matrícula de 180 mil alumnos en los niveles medio superior, superior y posgrado.
El derretimiento de capas de hielo y las precipitaciones interglaciares “promovieron la recarga del acuífero, el que a su vez se encontraba en construcción mediante los sedimentos generados por la intensa actividad volcánica del periodo, principalmente de los volcanes Popocatépetl y La Malinche”, comentó Rodríguez Espinosa.
El IPN explicó que el grupo de expertos a cargo del estudio tuvo la participación del propio Rodríguez Espinosa; de la alumna de posgrado Karen Minelli Ochoa; y de Estefanía Martínez, de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla.