La modelo e ingeniera en software, originaria de Chihuahua, entregó la estafeta a su sucesora no sin antes realizar su última pasarela sobre el escenario del certamen de belleza, momento para el que lució un espectacular y glamuroso vestido rojo, el color que le dio la victoria en mayo.
Previo a la final de Miss Universo 2021, Andrea Meza había cumplido con sus últimas tareas y actividades como cabeza de la organización. Duran su estancia en la ciudad de Eilat, en Israel, la mexicana ya había lucido espectaculares vestidos mientras convivía con las aspirantes al trono, pero sin duda su look para entregar la corona opacó a las competidoras de la edición número 70.
La mexicana recorrió el escenario del certamen entre lágrimas y saludando al público. Para el memorable momento portó un vestido rojo de ensueño que fusionaba el color rojo y rosa, los cuales se desvanecían hasta llegar al blanco.