fbpx

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, enfermo de covid-19, advirtió ayer que no participará del debate presidencial programado para la próxima semana, luego de que los organizadores decidieran hacerlo en formato virtual y sugirió una nueva fecha, a menos de una semana de las elecciones.

“No voy a hacer un debate virtual”, dijo vía telefónica a la cadena Fox Business en su primera entrevista desde que fue diagnosticado con coronavirus. “Es inaceptable para nosotros”, añadió el mandatario republicano que busca un segundo mandato, pero está rezagado en las encuestas frente al candidato demócrata Joe Biden.

El presidente pasó tres días hospitalizado y el lunes regresó a la Casa Blanca. Su médico, Sean Conley, afirmó que respondió “extremadamente bien al tratamiento” contra el covid-19, y puede retomar sus “compromisos públicos” a partir del sábado (mañana).

“El sábado será el décimo día desde el diagnóstico del jueves (pasado) y sobre la base de la trayectoria de los diagnósticos avanzados que ha estado realizando el equipo, anticipo un regreso totalmente seguro del presidente a sus compromisos públicos”, señaló Conley en un comunicado.

Respaldado en ello, Trump, de 74 años, exigió dos debates presenciales y acusó a la comisión bipartidaria que los organiza de “proteger” a su oponente demócrata, de 77 años, Joe Biden.

“No voy a perder mi tiempo en un debate virtual. Debatir no es eso”, aseveró.

La comisión explicó que busca “proteger la salud y la seguridad de todos los involucrados” en un país muy golpeado por la pandemia, que ha dejado más de 210 mil muertos, más que en ningún otro país del mundo.

La campaña de Trump indicó que los “estadunidenses merecen escuchar directamente a los dos candidatos presidenciales” y propuso que haya dos debates más: uno el 22 que ya estaba previsto y otro en reemplazo el 29, unos días antes de la elección.