El pasado sábado 19 de septiembre un reloj climático, colocado en Metronome, en la calle Union Square de Manhattan, en Nueva York, ha comenzado a marcar una cuenta regresiva del tiempo que le queda al planeta, antes de que comience a sufrir cambios irreversibles.
El reloj climático es un proyecto artístico de Gan Golan y Andrew Boyd, quienes pretender crear consciencia sobre las acciones para evitar que los efectos del calentamiento global se vuelvan irreversibles.
Inicialmente, muchas personas sintieron curiosidad por la forma en que supuestamente marcaba la hora dicho reloj; algunos creyeron que estaba fallado, pero la extraña forma de dar la “hora” tiene un propósito, ya que lo que marca el reloj es una cuenta regresiva.
El pasado sábado, alrededor de las 15:20 horas (tiempo local), las pantallas del Metronome mostraron la frase “La Tierra tiene una fecha límite”, y posteriormente aparecieron los números 7:103:15:40:07.
Dichos números marcan los años, días, horas, minutos y segundos que le quedan a nuestro planeta, antes de que comience a sufrir cambios irreversibles generados por el cambio climático.
Los artistas que crearon el reloj climático, explicaron que basaron sus cálculos en el Instituto de Investigaciones de Mercator sobre Cambio Climático, ubicado en Berlín, Alemania.