El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, quiere que los partidos de fútbol se reanuden pronto, pese al alto número de casos de coronavirus en el país.
Bolsonaro, argumentó que los futbolistas tienen menos probabilidades de morir del padecimiento COVID-19, en vista de su buena condición física.
Los torneos en Brasil están suspendidos desde el 15 de marzo, el campeonato brasileño debía comenzar en mayo, algo que parece difícil, en momentos en que el país se ha convertido en el epicentro del coronavirus en América Latina, con más de 5.900 muertes.
Los médicos advierten que el peor momento de la pandemia golpeará a Brasil en un par de semanas. Mientras tanto, el presidente informó que su nuevo ministro de salud emitirá una sugerencia para que los partidos se reanuden, pero, sin aficionados en los estadios.