Un juez federal falló el jueves que el gobierno de Estados Unidos debe dejar de utilizar una orden de salud pública para expulsar rápidamente a los migrantes con niños que son detenidos a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México.
El juez de distrito Emmet Sullivan, dio al gobierno dos semanas para detener una práctica que, según los opositores, es innecesaria y se basa indebidamente en la amenaza que representa el COVID-19 para privar a las personas de su derecho a solicitar asilo en Estados Unidos.
Mientras tanto el gobierno de Joe Biden, está evaluando el fallo y analizando la posibilidad de apelar.