Este miércoles, en Nigeria se destruyeron más de un millón de dosis de vacunas anticovid de AstraZeneca. Estas fueron donadas recientemente por países desarrollados, pero actualmente han superado su fecha de caducidad, así lo indicó el funcionario de la agencia nacional de atención primaria de la salud.
Este sería otro caso de los que la ONU viene advirtiendo desde hace tiempo, de las desigualdades en la distribución mundial de inmunizantes, que están dejando a muchísimas personas vulnerables en los países más pobres sin una sola dosis, inclusive en momentos en que los más ricos han puesto en marcha programas de refuerzo.