“Somos país de inmigrantes, pero también somos un país de leyes y continuaremos haciéndolas cumplir”.
Así de tajante se mostró el fiscal del distrito sur del estado de Misisipi, Mike Hurst, al detallar ante la prensa la que definió como la mayor redada contra inmigrantes realizada en Estados Unidos en la última década.
Este miércoles, la policía migratoria estadounidense (ICE, por sus siglas en inglés) detuvo a 680 trabajadores de siete plantas procesadoras de alimentos en distintas localidades de este estado sureño, donde existe una alta presencia de inmigrantes de origen latino.
Hurst del Partido Republicano, afirmó que esta redada contra “inmigrantes ilegales” fue planeada desde hace meses y que es “La acción de las fuerzas del orden más grande en un solo estado de la historia de EE.UU.”